Analizan preocupantes cifras de hospitalizaciones por intento de suicidio en adolescentes
Hasta siete atenciones médicas al día de este tipo se dieron durante este año y el pasado en el Hospital Carlos Van Buren, según números de la Sociedad Chilena de Pediatría.

La pandemia del Covid afectó a los escolares en diversos niveles. Chile fue uno de los últimos países en retornar a la presencialidad y hasta el día de hoy existen aristas relacionadas al tema. Los datos son duros y por lo mismo es que durante el martes se llevó a cabo un seminario dirigido a los docentes de la región de Valparaíso, iniciativa en el contexto de la alianza que se formó entre el Servicio Nacional de Educación de Valparaíso, el Hospital Carlos Van Buren, la Sociedad Chilena de Pediatría (SOCHIPE) y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. La jornada recibió como nombre “Efectos post pandémicos en el desarrollo neurológico y salud mental de la población escolar”.
En el marco del seminario, el presidente de la SOCHIPE, Carlos Schmidt, fue categórico en cuanto a las cifras. “Una de las poblaciones más afectadas fue la de los escolares. Debido a las cuarentenas fuimos unos de los países a nivel mundial que mayor ausentismo tuvo; fuimos uno de los últimos en volver a la presencialidad”, señaló Schmidt, quien añadió que “lo anterior trajo un tremendo efecto en la salud mental de nuestros niños y en su desarrollo neurológico. Con la vuelta de la presencialidad vimos como los docentes sufrían con niños con cuadros de irritabilidad, violencia, mucha dificultad para el aprendizaje y depresión; tuvimos una saga de pacientes con intento de suicidio en un brote nunca antes visto”.
En este sentido, Schimdt señaló que “se llegó a tener entre seis o siete internaciones en el Hospital Carlos Van Buren al día por intento de suicidio. Estamos hablando de adolescentes, ni siquiera adultos, y si bien este tipo de atenciones siempre han existido, nunca llegamos a las cifras que tuvimos este año y el año pasado”.
Por su parte, la psicóloga Paula Ascorra, docente de la PUCV, señaló que, en cuanto a los adolescentes y los problemas de salud mental en los establecimientos educacionales, “hay que estar atentos a los cambios de signos, de síntomas y de comportamientos, los que pueden durar varias semanas o meses, y generan un malestar en el niño, niña o adolescente”.
Ascorra agregó que “el colegio debe prestar atención” cuando la familia del estudiante o el menor se acerca al establecimiento solicitando ayuda. “Estas son las vías a través de las cuales uno se puede dar cuenta de que existe un problema de salud mental”, añadió.
En cuanto a los cambios conductuales que se pueden presentar en los niños o adolescentes, la especialista resaltó que hay que estar atentos al humor, rabietas, conversaciones sobre miedos o si están preocupados o ansiosos por algo.
Alianza
Cabe consignar que la actividad -realizada en el contexto de la alianza entre la Sociedad Chilena de Pediatría, el Hospital Carlos Van Buren, el Servicio Local de Educación Pública y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso- buscó capacitar a más de 300 docentes en temas de salud mental.
En ese sentido, el director del Hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, David Gutiérrez, señaló que “podemos trabajar de buena manera en conjunto si los profesores derivan bien y a tiempo a los niños. De esta manera se evitan complicaciones”.
En tanto Jeannette Fonseca, directora de Pregrado de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, dijo que “somos una universidad que pone en el centro de nuestro quehacer a la persona y por lo tanto, todo lo que podamos colaborar en la formación escolar de niños, niñas y adolescentes es una tarea que nos convoca no sólo por lo que sucede en la sala de clases, sino por lo que también sucede afuera de ésta”.
Por su parte el director ejecutivo de el Servicio Local de Educación Pública de Valparaíso, Daslav Mihovilovic, señaló que “sabemos que post pandemia ha habido múltiples situaciones en el aula que guardan relación con la salud mental de nuestros estudiantes y desde ahí la importancia de cómo trabajar con ellos o saber cuándo derivar cobra una relevancia suprema. La alianza que suscribimos es de suma importancia ya que permitirá la capacitación constante de nuestros funcionarios”.