Abuela gamer de Llay Llay juega Free Fire para sobrellevar la muerte de su esposo: “Me siento acompañada, ya no estoy sola en mi casa”
María Elena Arévalo, abuela de 81 años, adoptó la identidad de “Mami nena” en un juego virtual sugerido por su nieta, en el que decenas de millones de jugadores luchan por sobrevivir en una isla imaginaria.

María Elena Arévalo, adulta mayor chilena de 81 años apodada como la “abuela gamer”, es toda una celebridad en el mundo del gaming, donde encontró el pasatiempo perfecto para sobrellevar la soledad y superar la pérdida de su esposo gracias a la recomendación de su nieto.
La “Mami Nena”, apodada en el juego virtual, vive en el pueblo de Llay-llay, y su incursión en el mundo gamer se dio tras la muerte de su esposo luego de 56 años de casados.
Este hecho ha captado la atención internacional gracias a una reciente cobertura de la agencia AFP (Agence France-Presse), que destaca su reconocimiento en el mundo de los videojuegos.
En conversación con Las Últimas Noticias, María Arévalo recordó que “cuando falleció mi esposo, yo quedé sola, entonces ahí mi nieto me dijo ‘¿Por qué no juegas videos?’. ‘¿Cómo voy a jugar videos?, le dije yo, si ni siquiera sé mover el mouse. Entonces él me dijo: ‘yo le voy a enseñar’”.
“Aprendí a mover un poco los dedos. Y cuando empecé a jugar Free Fire ya podría mover el mouse, pero siempre en compañía de mi nieto, hasta que de a poco pude jugar sola. Y me gusta porque yo tenía mucho tiempo y pasaba mucho tiempo sola. Entonces eso fue lo que más me atrajo para seguir jugando videos”, comentó.
Así también, la Mami Nena, sostuvo que “jugando Free Fire me siento acompañada, ya no estoy sola en mi casa. Me salvó de la soledad”, y que tras el primer video subido a TikTok algunos niños de Llay Llay comenzaron a reconocerla en la calle y pedirle fotos y firmas.
Héctor, nieto de la abuela “gamer”, afirmó que cuando fueron invitados a México por Garena para celebrar el quinto aniversario de Free Fire se sorprendió porque “niños y adultos se abalanzaron encima de ella y le pedían autógrafos, fotos todo”.