Más de 10 mil millones de pesos en ahorro al bolsillo ha generado la Farmacia Comunal de Quillota en 9 años de funcionamiento
El alcalde Luis Mella destacó el impacto positivo que ha tenido esta iniciativa municipal, que actualmente funciona en las instalaciones del ex hospital San Martín.

En su noveno aniversario, la Farmacia Comunal San Martín se consolida como un servicio esencial para la comunidad quillotana, garantizando el acceso equitativo a medicamentos y contribuyendo directamente al bienestar y la economía familiar.
El proyecto comenzó en 2016 bajo el nombre Farmacia Comunal Banamor, en calle Pinto. Desde 2024 funciona en su nueva sede en los terrenos del ex hospital San Martín, donde atiende a miles de usuarios cada mes.
Solo entre septiembre de 2024 y septiembre de 2025, la farmacia atendió a 18.144 usuarios, entregó 188.379 medicamentos y realizó más de 80 mil atenciones, generando un ahorro estimado de 2 mil millones de pesos en un año.
“Este proyecto ha cambiado la vida de muchas familias. Calculamos que en nueve años los quillotanos han ahorrado más de $10 mil millones, especialmente los adultos mayores, que antes destinaban gran parte de sus pensiones a remedios”, destacó el alcalde Luis Mella.
El senador Juan Ignacio Latorre también valoró el modelo impulsado por Quillota: “Estas son políticas locales exitosas que alivian el bolsillo de las familias y se complementan con otras medidas nacionales como el copago cero o la APS Universal”.
Por su parte, el director del Departamento de Salud Municipal, doctor Xavier Mendoza, explicó que el impacto trasciende lo económico: “Muchos usuarios nos cuentan que ahora pueden cubrir otras necesidades familiares. Es una política pública que mejora directamente la calidad de vida”.
En sus modernas dependencias, la farmacia ofrece módulos personalizados, atención directa de un químico farmacéutico y apoyo a otras iniciativas de salud, como vacunación e inscripción en APS Universal. Según su encargada, la químico farmacéutico Patricia Aguilar, los tiempos de espera se redujeron a 10 o 15 minutos, y “los usuarios lo agradecen”.
Uno de ellos, Marcial Olivares, lo resume así. “Los precios hacen una gran diferencia. Un medicamento que afuera me cuesta seis mil pesos, acá vale mil seiscientos. El del corazón, que cuesta 43 mil, acá lo compro en 28 mil. El ahorro es enorme”.
Desde la apertura de la primera farmacia comunal en 2016 hasta hoy, más de 40 mil quillotanos han accedido a medicamentos a precios justos gracias a las farmacias municipales, consolidando a Quillota como referente nacional en salud pública local.





